La mina de oro de Las Médulas fue la explotación aurífera de mayores dimensiones dentro de todo el imperio romano. Estuvo en explotación durante doscientos años (s. I-III).
Una vez integrado el noroeste peninsular en el imperio romano como parte de la Provincia Hispania Citerior, Las Médulas quedaron incluidas dentro de la profunda reorganización económica y administrativa de toda la región a lo largo de los siglos I y II d.C.
La explotación aurífera no puede entenderse sin la creación por Augusto de un sistema monetario basado en el aureus, la moneda de oro, como patrón imprescindible para hacer frente a los pagos de la administración y del ejército y para controlar el comercio.
La explotación de las tierras auríferas de Las Médulas pasó por dos fases diferentes; una primera artesanal, de época prerromana, en la que la población indígena astur lavaba las arenas en los ríos, de la que ser conservan restos de su orfebrería.
Una segunda, ya en época romana, en la que se llegó a una verdadera explotación industrial minera. El contenido en oro de los aluviones de Las Médulas es muy dispar yendo de los 10-20mgr/m3 a los 60-300 mgr/m3 .
La explotación de la mina se realizó de acuerdo con dicha riqueza. La evolución y ritmo de extracción del metal estuvo siempre condicionado por los cambios, necesidades de moneda y devaluaciones del sistema monetario, de forma que su crisis hacia comienzos del siglo III supuso el final de las labores mineras.
En Las Medulas podemos ver restos de varios tipos de explotación. Podemos observar una especie de cárcavas que corresponden a una forman de explotación que dejaba correr el agua por la superficie del terreno. Pero el método que ha dejado la huella más visible en forma de barrancos, cuevas y galerias es el denominado ruina montium y al que ya se refirió en su época el historiador Plinio el Viejo.
En un principio se creyó que la mano de obra que trabajaba en Las Médulas eran exclavos, pero nunca apareció ningún indicio de tal echo: no hay inscripciones de esclavos.
Al realizar excavaciones en los alrededores de la explotación aparecieron importantes restos arqueológicos de poblaciónes astures preromanas como el poblado del Castrelin de San Juan de Paluezas. Los estudios posteriores a la excavación evidenciaron que las poblaciones tenían un margen de independencia ya que aparecieron armas con las que cazaban, es decir,los obreros de Las Médulas eran poblaciones jurídicamente libres pero su trabajo se convierte en un auténtico tributo debido al régimen fiscal impuesto por el estado romano. Aun así las poblaciones – siempre dentro de los nuevos marcos espaciales y organizativos- regulaban su forma de vida y su abastecimiento.